Solo quedas tú, pequeña gota de lluvia,
de aquel infernal aguacero.
Estas guarecida entre pétalos,
cual damisela sobre rojas sábanas.
Qué será de ti, adonde irás
pasadas las horas, me pregunto.
Volverás a algún caudaloso río
ó subirás presurosa a cercana nube.
Revélame tu misterio, dime tu secreto,
eres agua, viento, ó simplemente gas?
Viniste del cielo ó al cielo fuiste,
dónde naciste, donde creciste.
Tu madre fue el arroyo que acunó
de aquel infernal aguacero.
Estas guarecida entre pétalos,
cual damisela sobre rojas sábanas.
Qué será de ti, adonde irás
pasadas las horas, me pregunto.
Volverás a algún caudaloso río
ó subirás presurosa a cercana nube.
Revélame tu misterio, dime tu secreto,
eres agua, viento, ó simplemente gas?
Viniste del cielo ó al cielo fuiste,
dónde naciste, donde creciste.
Tu madre fue el arroyo que acunó
tus ansias de volar muy alto.
Subiste a la cima y te voltearon,
vientos non santos.
Húmeda perla entre hojas,
cubriéndote del sol, pétalos,
protegen tu existencia,
efímera ó eterna, discurro.
Subiste a la cima y te voltearon,
vientos non santos.
Húmeda perla entre hojas,
cubriéndote del sol, pétalos,
protegen tu existencia,
efímera ó eterna, discurro.
Qué será de ti, pequeña pizca de agua.
La duda me carcome, pienso, cavilo,
y no logro descifrar tu misterio.
tus versos me lembram un amigo peruano que conheci, ele era poeta e pintor
ResponderBorrarGracias, Lu.
ResponderBorrarMe halagas con tu comentario.
Te diuré un secreto no soy pintor, y poeta... no creo.
Un abrazo grande.