Raíces Curioso Sin manos Salir a caminar por la ciudad es como sumergirse en una obra en movimiento. Nada está quieto. Todo vibra. En estas tres fotos en blanco y negro, la calle no es un simple escenario: es el alma misma de cada imagen. La primera foto muestra una peatonal llena de gente en Mar del Plata. Algunos caminan con paso firme, otros se detienen a charlar, a mirar vidrieras o simplemente a estar. Los árboles parecen abrazar la escena, como si fueran testigos de un ritmo que no se detiene. Hay algo cotidiano y, a la vez, profundamente poético en ver cómo compartimos el espacio público, cómo nos cruzamos sin conocernos, cómo formamos parte de una coreografía invisible. En la segunda imagen tomada en Recoleta, una joven se sienta en el cordón de la vereda, acompañada por su perro. Ella mira hacia un costado, pensativa. Él, atento, parece cuidar la escena. Es un momento de pausa en medio del movimiento. Una postal sencilla que nos recuerda que también hay lugar para det...
Una mirada poética a la vida urbana y cotidiana