Luces.
Vereda de barrio.
Las dos imágenes de hoy me sugieren alguna similitud entre ellas.
Ambas documentan un hecho en si casi idéntico, parecido, usual y cotidiano.
Gente desplazándose por la vereda y la pared como muro de contención y guía a destino.
Pero a la vez, si indagamos fijándonos bien, podemos ver dos mundos muy diferentes.
La primera fotografía corresponde a una tomada en el centro de la ciudad, la segunda en un barrio de la capital.
En la de arriba podemos apreciar la grandiosidad de su arquitectura.
Mármoles, hierros y cristales artísticamente trabajados que nos dan cuenta de la época de esplendor que se vivió antiguamente cuando todo se concentraba en lo que es hoy el centro de la urbe.
La segundo foto nos muestra una parte de lo que es el barrio, mas humilde en comparación con la primera.
En esta, si bien la artesanía está presente, lo hace desde un lado más austero.
Quizás dos mundos diferentes o dos épocas distintas.
Ojalá convivan por mucho tiempo y que una no avasalle y destruya a la otra.