Esas pequeñas aves Solitario Nos mira, nos presta atención, estudia movimientos, expectante observa todo a su alrededor. Firme en la rama se muestra sin miedos, desafiante y en una actitud provocativa. En pareja. La llegada de la compañera cambió la escena, el solitario ya no está solo. Su mundo es ahora otro, en actitud de protección a su compañera, nos da la espalda y nos ignora. Una actitud casi humana... ¿no?