Fotos tomadas aprovechando la oportunidad cuando me topé con estos animalitos.
Dos perros en distintas circunstancia pero con algo en común: estaban solos, sueltos deambulando sin la compañía de un dueño.
En la primera foto el perro llegó y se acostó a la sombra en un día muy caluroso se extendió y quedó dormido.
En la segunda estaba echado en el suelo y yo pasaba por el lugar.
Aprovecho la oportunidad para esbozar unos consejos a la hora de fotografiar a mascotas:
En este caso de los perros extraños y quietos hice lo siguiente:
-Como en cualquier fotografía el foco es sí o sí. La nitidez no se negocia.
-Ponerse a la altura del animal, agachándote tratando de observar con la misma perspectiva del sujeto y el resultado será mucho mejor del que sería una toma a tu altura.
-Usar preferentemente un tele para no tener que acercarse mucho dado el peligro que pudiera presentar o que nuestra presencia pudiera molestarlo y ahuyentarlo.
-La luz natural, la del día, sin flash, es ideal.
-Para el caso de que la mascota esté en movimiento y para eso necesitamos mucha velocidad en el disparo.
La mayoría de las cámara proveen un modo de fotografías en movimiento (o deportivas) con lo cual podrás captar aspectos de tu mascota que te sorprenderán.
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