El puerto de Mar del Plata es uno de los rincones más característicos y pintorescos de la ciudad. Allí, los barcos pesqueros de intenso color naranja y rojo no solo cumplen con su función de trabajo en alta mar, sino que también se han convertido en un verdadero símbolo cultural y turístico. Estas embarcaciones, alineadas en el muelle, transmiten una imagen única: la fuerza del mar se combina con la perseverancia de quienes lo enfrentan día tras día. Los nombres grabados en sus proas —muchos dedicados a santos, vírgenes o seres queridos— reflejan la fe y el arraigo de las familias que dependen de la pesca para vivir. Al observarlos de cerca, los detalles son un espectáculo en sí mismos. El contraste de los tonos cálidos de los barcos con el azul intenso del agua crea un paisaje que enamora a fotógrafos, turistas y vecinos por igual. Los reflejos en el mar parecen una pintura en movimiento, un recordatorio de que la belleza puede encontrarse en las escenas más simples de la vida cotidia...
Una mirada poética a la vida urbana y cotidiana

No hay más que dos opciones, si se quiere publicar ahora fotos. Fotografíar lo que tienes a mano en casa o buscar entre los archivos y por lo que observo, lo has ido aplicando en estas últimas entradas.
ResponderBorrarEspero que ese virus, siga alejado de tí
Besos
Es una manera de volver al pasado quizás para evadir el presente. Además no queda otra cosa.
ResponderBorrarTambien sirve para practicar distintas formas de editarlas.
Ojalá que toda tu España pronto este libre del maldito enemigo.
Un abrazo.