El puerto de Mar del Plata es uno de los rincones más característicos y pintorescos de la ciudad. Allí, los barcos pesqueros de intenso color naranja y rojo no solo cumplen con su función de trabajo en alta mar, sino que también se han convertido en un verdadero símbolo cultural y turístico. Estas embarcaciones, alineadas en el muelle, transmiten una imagen única: la fuerza del mar se combina con la perseverancia de quienes lo enfrentan día tras día. Los nombres grabados en sus proas —muchos dedicados a santos, vírgenes o seres queridos— reflejan la fe y el arraigo de las familias que dependen de la pesca para vivir. Al observarlos de cerca, los detalles son un espectáculo en sí mismos. El contraste de los tonos cálidos de los barcos con el azul intenso del agua crea un paisaje que enamora a fotógrafos, turistas y vecinos por igual. Los reflejos en el mar parecen una pintura en movimiento, un recordatorio de que la belleza puede encontrarse en las escenas más simples de la vida cotidia...
Una mirada poética a la vida urbana y cotidiana
Buenas, me han encantado las fotos y me sirven de inspiración para seguir aprendiendo en la fotografía y seguir avanzando en este mundillo que nunca se acaba, me animo a seguirte para seguir viendo tus nuevas entradas.
ResponderBorrarUn saludo
http://www.raul-sp.blogspot.com/
Hola Raul SP.
ResponderBorrarBienvenido.
Eres muy amable y espero servirte de algo en tu aprendisaje.
Solo un consejo:Sigue tu intuición.
Un abrazo.
Buenas, muy bueno el blog, aunque hay alguna fotografía como esta que quizás tenga demasiada exposición, pero aún así está muy bien! Te sigo!
ResponderBorrarSaludos!
Hola DGalilea.
ResponderBorrarBienvenido.
Gracias por exponer tu punto de vista y si quizás exageré en la edición.
Lo tendré en cuenta.
Un abrazo,