miércoles, julio 26, 2017

La foto disparador de recuerdos.



Un hombre sentado y su perrito parado en dos patas.

De pie

Cuando una pasea por Recoleta los fines de semana disfruta del día mientra  busca inconscientemente
alguna novedad, algo que nos atraiga. Lo que menos pensaba que yo iba a encontrarme con mis añosos recuerdos.
La imagen de hoy me volvió al pasado, a mí pasado, unos sesenta o más años atrás. Entonces vivía en mi pueblo natal, en la casa del abuelo.
Estaba ubicada en una esquina y tenía forma de L. Todas sus habitaciones daban a la calle.Una casa de ésa época era de techos muy altos, habitaciones amplias .
En el interior teníamos una galería techada que la separaba del patio.
Mi habitación era la de la esquina con un balcón  amplio y protegido con persianas metálicas. Para llegar a la salida que daba al patio debía pasar por una habitación contigua, luego el pasillo que comunicaba con el baño, luego el comedor y finalmente llegaba a la cocina con puerta al exterior, salida a la galería.
En ese entonces tenía un perro al que llamábamos Batuque, nombre popular en aquellos años, que dormía en la galería y que tenía como único mobiliario una bolsa de arpillera que le servía de cama.
Otros tiempos en donde el perrito no era parte de la familia como hoy, sino que era un ser distinto y ocupaba otro lugar fuera de la casa.
No se conocía el alimento balanceado por lo que su alimentación pasaba por lo que comíamos nosotros. Felizmente la carne no era un problema económico, y podíamos facilitársela.
Le gustaba comer la que tenía huesitos: el  asado de costilla y la costeleta..
En Bueno Aires a la costeleta se la llama bife de costilla y en otras partes chuleta.
A mí, como a todos los chicos, me gustaba dormir mucho y no me levantaba muy temprano.- siempre fuí a la escuela de tarde-.
Mi mamá era la primera en levantarse y abrir la puerta de la cocina y siempre- nunca supe por que-, Batuque esperaba ese momento para introducirse en a casa, recorrer todas las piezas hasta llegar a mi cama y darme cariños besos  hasta despertarme.
Cuando lo lograba, solito- sin decirle yo nada- corría hasta la cocina y salía de la casa. Esta rutina solo terminó cuando Batuque murió.
Recuerdos que volvieron  como en una bruma de mi memoria gracias a la imagen de ese perrito de pie contemplando a la gente que pasaba cerca de él.

domingo, julio 23, 2017

Retratando el alma del arte.

Retrato de cabeza de estatua viviente encuadrada con marco.

Retrato de arte callejero

En el retrato fotográfico a tratamos de registrar más que la belleza o no del retratado, sus expresiones, sentimientos y cualquier rasgo que nos muestre algo que va más allá de los físico, queremos llegar al alma..
En esta imagen retratamos a una escultura viviente, una caracterización de una estatua por parte de un artista callejero. entonces:-¿ como llegar al alma de una estatua?,  me pregunto. Sólo se me ocurre pensar que el hombre-en este caso-el artista que habita dentro suyo es su verdadera alma.
La imagen nos muestra la figura , con la cabeza inclinada, los ojos cerrados, inmóvil en una actitud de recogimiento.El artista está en un trance íntimo en cumplimiento de su papel. Papel para lo que seguramente a estudiado mucho, vaya uno saber por cuanto tiempo,y practicado infinidad de veces, hasta lograr dominar esta técnica que no es nada fácil de llevar a cabo.
Para empezar este camino del arte , la persona debe tener algo muy importante: vocación. Ésta le da  el empuje necesario para afrontar el camino a recorrer con dedicación y mucho esfuerzo. Es la que le da también el coraje para exponerse a la gente, a todo el mundo con diferentes condiciones culturales que lo exponen a diferentes reacciones.
Por lo general la práctica de este arte la llevan a cabo los fines de semana cuando están libre de su trabajo, su verdadera fuente de ingresos. Exponen su creación a un precio que la voluntad de los transeúntes determina. Simplemente trabajan  por amor al arte.
Sin pensarlo, sin querer, esta fotografía resultó un homenaje  a todos éstos artistas callejeros que con su arte nos alegran el paseo en los fines de semana.


                                    

miércoles, julio 19, 2017

Necesito compañia

Joven sola con celular en una soleada tarde.

Joven sola en Recoleta.

La tarde soleada se prestaba para salir a caminar, pasear por el barrio disfrutando de sus colores, sus aromas y plazas y paseos.
Por ahí sin querer como siempre fuí a dar con el Paseo de la Recoleta donde anidan esos pájaros soñadores que entre tiempo y tiempo muestran sus habilidades manuales. Muchos bien dispuestos esperan por los turistas ofreciendo sus productos.
Dos puntos de atractivo son el Legendario Cementerio donde reposan los cuerpos de muchos de nuestros próceres y de familias ligadas a la fundación de nuestra nación y la Basílica de Ntra.Señora del Pilar, terminada en 1732, formando parte del convento Franciscano de recoletos.
Mucha historia argentina en estos dos sitios que nos unen con nuestro pasado.
Mucha gente paseando por el lugar y de pronto aparece la protagonista de esta imagen, sola y con el celular en sus manos en actitud de comunicarse con alguien.
 Estaba sola por hacerse desencontrado con alguien , o tal vez porque ese "alguien " estaría llegando tarde a la cita. En fin sea cual sea el motivo, pensé que no estaría sola por mucho tiempo.